Sacerdote, Gran Bailío y Capellán Magistral de la Asociación Chilena de la Orden de Malta, Profesor de Teología, fue pro Gran Canciller de la Universidad Católica de Chile, Obispo de Rancagua y de Valparaíso. Culminó su carrera eclesiástica como Cardenal Prefecto Emérito de la Congregación para la Doctrina de la Fe y la Disciplina de los Sacramentos, y Cardenal Protodiácono, quien anunciara al mundo, el 19 de abril de 2005, la elección de S.S. el Papa Benedicto XVI como nuevo Sumo Pontífice.
Gran defensor de la doctrina cristiana, no vaciló en enfrentarse con poderes políticos en defensa de principios básicos como la vida de los que están por nacer, el matrimonio entre un varón y una mujer, el derecho de los padres a educar a sus hijos, entre otros.
Vaya para él nuestro recuerdo agradecido por su gran cercanía y amistad, como por su testimonio de fe y cuidado de la Iglesia y de la patria chilenas.