A lo largo de los siglos, la Orden de Malta ha dado grandes frutos de santidad que la muestran como un camino seguro para alcanzar la eterna bienaventuranza.
El ejemplo de los santos canonizados de la Orden, ilumina para recorrer el camino que lleva al cielo. Pero cientos de miembros, anónimamente y sin haber recibido un reconocimiento oficial por parte de la Iglesia, han testimoniado en sus vidas su fiel compromiso con el Señor. Los unos y los otros son el orgullo y la esperanza de esta Orden casi milenaria.
Nuestra Señora de Filermo
Fiesta: 8 de septiembre
La Virgen María, en la advocación de Nuestra Señora de Filermo, es un icono que los Caballeros Hospitalarios encontraron durante su estancia de dos siglos en la isla de Rodas (Grecia). Los habitantes de Rodas creían devotamente que esta imagen tan milagrosa había sido pintada por san Lucas. Tras el sitio de Rodas, y durante el establecimiento en la isla de Malta, el icono de la Virgen de Filermo los acompañó, cantando sus hijos en su honor el himno Tu spes afflictiis, sola salus (Tu, esperanza de los afligidos; Tu, única salud).
Tras los diversos avatares que sufrió la Orden, la imagen original se encuentra hoy en el Museo Nacional de Cetinje, en Montenegro. Está pintado con témpera sobre madera, mide 44 x 36 cm y tiene una rica cobertura de oro, la cual deja al descubierto solamente la cara de la Virgen. Sobre la cobertura está grabada la cruz de Malta con sus ocho puntas que irradian alrededor de la cabeza de la Virgen. Es la cruz cuyas puntas representan las ocho bienaventuranzas, y que los Caballeros llevaban en el pecho en tiempos de las Cruzadas cuando luchaban para liberar el Santo Sepulcro.
En 1988, la Orden de Malta fue encomendada a la Santísima Virgen durante una celebración eucarística delante de la gruta de Lourdes. Esta consagración se renueva solemnemente año a año.
San Juan Bautista: el Precursor
Fiesta: 24 de junio
San Juan Bautista era primo de Nuestro Señor. De él, dijo Jesús: "En verdad les digo: Entre los que nacen de mujer no se ha levantado otro mayor que Juan el Bautista; pero el más pequeño en el reino de los cielos, es mayor que él." (Mt 11:11)
En pleno auge de su fama y prestigio, Nuestro Señor se hizo bautizar por él en las aguas del río Jordán, antes de comenzar su vida pública.
No pocos discípulos habían comenzado su camino con las enseñanzas del Bautista y, más tarde, cuando discretamente fue quedando en un segundo lugar, nos queda su frase: "Conviene que Él crezca y yo disminuya".
San Juan Bautista murió mártir, dando testimonio de su fe ante la injusticia y la inmoralidad. No en vano la defensa de la fe es aún hoy parte del lema de la Orden.
Beato Gerardo de Tenque, fundador de la Orden de Malta
Memoria: 13 de octubre (+ 1120)
No está claro si procede de la actual Italia o de Francia. hacia el final del siglo XI, estableció en Jerusalén un hospicio para los peregrinos y los enfermos junto a la iglesia de San Juan. Para su mantención, fundó una comunidad religiosa que se rigió por la Regla de San Agustín. El 15 de febrero de 1113, Pascual II aprobó solemnemente esta nueva Orden, que había sido establecida incluso antes de que los cruzados fueran por primera vez a Palestina a recuperar el Santo Sepulcro. La carta del papa Apostolica, voluntatis piae postulatio, estaba dirigida a "Gerardo, fundador y guardián del hospicio en Jerusalén, y sus sucesores legítimos."
Oración
Oh Dios,
que exaltaste al beato Gerardo de Tenque,
bendiciéndolo por su atención a los pobres y los enfermos,
y fundaste por intermedio suyo la Orden de San Juan de Jerusalén,
danos la gracia de ver, como él lo hizo, la imagen de tu Hijo en nuestros hermanos.
Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo y el Espíritu Santo por los siglos de los siglos.
Amén.
Beato Raimundo de Puy, Gran Maestre de la Orden
Memoria: 18 de noviembre
(+ 1160 apr.)
No se sabe si nació en el Delfinado, en una antigua y noble familia que se perpetúa a través de las Casas de Rochefort y Montbrun, o si es de origen italiano y, en este caso, estaría relacionado con el Adhémar du Puis, legado apostólico durante la primera Cruzada.
Fue el sucesor inmediato del beato Gerardo. Fue el Primer Maestro del Hospital de San Juan de Jerusalén. Bajo su dirección, el Hospital tuvo un fuerte desarrollo, aun cuando los caballeros hospitalarios -como era necesario para llevar a cabo su misión original- debieron también luchar contra los infieles.
El beato Raymundo introdujo la cruz de ocho puntas y la típica prenda de vestir que lucían los primeros miembros de la Orden para simbolizar su promesa de permanecer en un estado de cruzada, es decir, de seguir el ejemplo de los mártires, dando sus vidas por Cristo. Introdujo también entre la triple división en capellanes, caballeros y hermanos.
Se lo representa vestido con un gran manto ceremonial ornamentado con la cruz blanca, con una espada -porque era un Caballero-, un rosario en la cintura y un crucifijo en la mano -porque era un monje.
San Nicasio Camuto de Burgio, mártir
Memoria: 1 de julio (+ 1187)
Nació en Sicilia en el siglo XII. Tras convertirse en Caballero de la Orden de San Juan, luchó como uno de los defensores en el asedio de Acre, en Palestina, donde fue capturado y decapitado junto a muchos otros, incluso a su hermano Ferrandino.
Su imagen se encuentra pintada en varias iglesias (Santo Domingo de Palermo, Santa Catalina dell'Olivella –próxima al altar de la Virgen de Itria-, Santa María de los Milagros, en Palermo, así como en San Juan Decapitado, en Valletta, Malta), lo que demuestra que no se trata de un mito.
Oración
Oh Dios,
orgullo de los humildes y de los amantes de la virginidad,
que llamaste a santa Ubaldesca
a la vida religiosa en la Orden de San Juan de Jerusalén,
haz que, a través de sus oraciones y su ejemplo,
nos regocijemos en ser humildes y seguirte con una mente pura.
Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo y el Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
Santa Ubaldesca Taccini, virgen
Memoria: 28 de mayo
(1136 - 1206)
Nació en una humilde familia de Calcinaia (Pisa, Italia). Desde muy pequeña, su amor particular hacia las cosas de Dios le hacía vivir virtudes como la humildad y practicar el ayuno y la oración. Sintiendo un llamado especial al cuidado de los enfermos, cuando tuvo quince años se trasladó a Pisa, donde ingresó en la Orden de San Juan de Jerusalén. Su caridad y ternura con los enfermos del Hospital de San Juan no pasaron desapercibidas, atrayendo la visita de personas que buscaban un consejo espiritual y una palabra de alivio en la enfermedad. Sus mortificaciones y ayunos se prolongaron durante los más de cincuenta años que vivió como religiosa, y ya en vida se testimonian sus milagros. Murió el 28 de mayo de 1206, cuando se celebraba la fiesta de la Santísima Trinidad. Se le tributó culto espontáneo en la ciudad de Pisa.
Oración
Oh Dios,
orgullo de los humildes y de los amantes de la virginidad,
que llamaste a santa Ubaldesca
a la vida religiosa en la Orden de San Juan de Jerusalén,
haz que, a través de sus oraciones y su ejemplo,
nos regocijemos en ser humildes y seguirte con una mente pura.
Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo y el Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
San Hugo Canefri de Génova
Memoria: 8 de octubre
(+ 1233 apr.)
Es uno de los santos más venerados de la Orden. Nació hacia 1186 en Alessandria (Italia). Con el hábito de Caballero de la Orden de San Juan de Jerusalén, después de largas campañas en Tierra Santa, fue elegido Maestro de la Comandancia de San Juan de Prè en Génova (Italia), donde trabajó en la enfermería. Aun estando vivo, era conocido por sus milagros.
Oración
Oh Dios,
que otorgaste a san Hugo el poder para sanar a los enfermos
mediante la señal de la cruz,
danos el espíritu de su amor para servirte en nuestros hermanos enfermos.
Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo y el Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
Beato Gerardo Mecatti de Villamagna, eremita
Memoria: 25 de mayo
(+ 1245 apr.)
Junto con san Hugo y santa Ubaldesca, son los santos más venerados de la Orden. Nació en Villamagna, cerca de Florencia, alrededor de 1174. Siguiendo a su señor feudal, llegó a Palestina donde se convirtió en un hermano de la Orden de San Juan de Jerusalén.
Llevó una existencia digna de admiración por su humildad, su piedad y su compasión por los pobres. Tras regresar a su ciudad natal, recibió de san Francisco de Asís el hábito de hermano menor. Sin embargo, no abandonó la Orden de San Juan, llevando toda su vida sobre su ropa la cruz blanca distintiva. Vivió como un ermitaño en la penitencia y la oración.
Se lo representa con la cruz blanca sobre el pecho, sosteniendo en la mano una rama de cerezas en recuerdo de un milagro que le sucedió en vida. Su cuerpo se encuentra en Villamagna, donde su memoria se celebra todos los años. Todavía en el siglo XVII, su cuerpo estaba bien conservado y emitía una fragancia agradable, como se pudo comprobar cuando se lo mostró al pueblo.
Oración
Oh Dios,
que llamaste al beato Gerardo Mecatti,
al igual que a Tu Hijo, a una vida de penitencia y oración,
ayúdanos a seguir su ejemplo
para no apartarnos de la oración contemplativa ni de la práctica de las buenas obras,
y así merecer recibir el reino de la gracia y gozar del triunfo de la Cruz.
Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo y el Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
Beato Gerlando de Alemania, religioso
Memoria: 19 de junio
(+ 1271 apr.)
Se desconoce si llegó de Polonia o de Alemania, pero se sabe que fue un Caballero de la Orden de San Juan de Jerusalén y que, en la época de Federico II, sirvió en una pequeña iglesia de Caltagirone, en Sicilia, cuidando de viudas y huérfanos con dedicación admirable. Hasta el día de hoy, sus reliquias son honradas en la basílica de San Giacomo en Caltagirone.
Oración
Señor Dios,
que trajiste al beato Gerlando desde el norte hasta Sicilia
y le inspiraste usar una ruda camisa de pelo
en lugar de la armadura de los caballeros de la Orden,
despierta en nosotros un celo semejante al suyo
para que nuestra vida pueda ir perfeccionándose cada vez más.
Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo y el Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
Beato García Martínez, religioso, peregrino
Memoria: 20 de noviembre
(+1286)
Poco se sabe de su historia, excepto que era portugués y que su vida fue muy santa. Está enterrado en la iglesia del monasterio de Leza (España), hogar de los Capellanes Conventuales de obediencia de la Orden de Malta. Desde su muerte, ha hecho grandes milagros.
Beato Pedro Pattarino de Imola, Prior de la Orden
Memoria: 5 de octubre
(+ 1320)
Nació alrededor de 1250 en Imola (Italia) en la familia de los señores de Linasio. Fue un poderoso abogado que, tras mediar en 1297 entre güelfos y gibelinos en la Romaña, se convirtió en Caballero de la Orden de San Juan de Jerusalén y fue elegido Gran Prior de Roma.
Dedicó gran energía a cuidar a los enfermos en Florencia. Tras su muerte, fue enterrado en la iglesia de Santiago en la Corbolini.
Oración
Oh Dios,
que diste al bienaventurado Pedro el don de curar la discordia y la división,
concédenos por su intercesión la gracia de luchar por la paz
para ser llamados hijos de Dios.
Por el mismo Cristo, Tu Hijo, que vive y reina contigo y el Espíritu Santo
y es Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
Santa Toscana Canoculi de Verona, religiosa
Memoria: 14 de julio
(+ 1344 apr.)
Nació en Zevio, cerca de Verona (Italia) hacia 1280. Junto a su marido, Albert Canoculi, realizó una extraordinaria labor por los pobres. Ya viuda, vendió cuanto poseía y se convirtió en monja de la Orden de San Juan de Jerusalén, dedicando su vida a la oración y al cuidado de los enfermos.
Oración
Oh Dios,
que libraste a tu sierva Toscana de las turbulencias de este mundo,
tanto como esposa y como viuda,
y le hiciste instrumento en nuestra Orden de una notable obra de caridad para los pobres, concédenos la gracia de servirte como ella y de agradarte por nuestra fe y nuestros actos.
Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo y el Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
Santa Flora de Beaulieu
Memoria: 5 octubre
(+ 1347)
Flora -o Flor- nació alrededor de 1300 en Maurs, en la diócesis de Saint-Flour (Francia), y tomó el velo a los trece años en el monasterio de las Hermanas de San Juan de Jerusalén en Beaulieu, en la diócesis de Cahors. En el hospital junto al monasterio, se dedicó a cuidar a los pobres y a los enfermos. Son conocidas sus experiencias místicas. Tenía una especial devoción a Cristo Crucificado, a Nuestra Señora de la Anunciación y a San Juan Bautista. Sus reliquias se encuentran en la iglesia de Issendolus, en Cahors.
Oración
Omnipotente y misericordioso Señor,
que bendeciste a Flora,
haciéndola vivir como virgen en la Orden de San Juan de Jerusalén,
concédenos que, siguiendo su ejemplo, podamos amarte cada vez más.
Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo y el Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
San Nuño Alvares Pereira, Prior de la Orden
Memoria: 6 de noviembre
(1360 – 1431)
Nuño Alvares Pereira, primo del fundador de la familia Braganza, nació en Santares (Portugal). Luego de ser un famoso caballero, Condestable del reino de Portugal y Prior de la Orden de San Juan de Jerusalén, lo dejó todo –títulos y bienes- para convertirse en un hermano lego en la Orden de los Carmelitas, donde lo distinguieron su devoción a la Virgen y su humildad, pues realizaba las funciones más humildes del convento. Pedía limosna de puerta en puerta y era extraordinariamente generoso y caritativo con los pobres.
Fue beatificado en 1918 por el papa Benedicto XV y canonizado en 2009 por Benedicto XVI.
Oración
Oh Dios,
que llamaste al bienaventurado Nuño a deponer las armas del mundo
y seguir a Cristo bajo la protección de la Santísima Virgen,
alcánzanos, por su intercesión,
que también podamos negarnos a nosotros mismos y aferrarnos a Ti con todo el corazón.
Por el mismo Cristo Jesús, tu Hijo, que vive y reina contigo y el Espíritu Santo
y es Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
Beato Adrian de Fortescue, mártir
Memoria: 8 de julio
(+ 1539)
Sir Adrian de Fortescue nació en Hertfordshire (Inglaterra) alrededor de 1480. Recibió el favor del rey Enrique VIII, tomando parte en las guerras contra Francia en 1513 y 1523. Su piedad personal la atestigua su Libro de horas, que sobrevive con máximas de devoción anotadas de su propia mano.
Sir Adrian se casó dos veces y tuvo siete hijos. En 1533, se convirtió en concanónigo de los dominicos de Oxford.
En 1539, sin que mediara juicio, fue condenado por alta traición a raíz de una ley del Parlamento que condenaba a quienes se oponían a las políticas eclesiásticas de Enrique VIII.
Fue decapitado en la Torre de Londres un 9 de julio, junto con el venerable Sir Thomas Dingley, también Caballero de la Orden.
La Orden de Malta ha considerado a Sir Adrian como un mártir y, desde el siglo XVII, ha promovido su devoción. León XIII lo declaró beato el 13 de mayo de 1895.
Oración
Oh Dios,
ya que todas las cosas están en Tus manos,
otórganos, por intercesión de la oración del mártir Adrian,
que los que celebramos hoy su fiesta podamos ser fuertes en el amor de Tu nombre
y nos mantengamos unidos a tu santa Iglesia, aun a costa de nuestras vidas.
Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo y el Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
Beato David Gunston, mártir
Memoria: 12 de julio
(+ 1541)
Sir David Gunston pertenecía a una familia de nobles marinos ingleses y fue recibido en la Orden en Malta el 20 de octubre de 1533. Sirvió en las naves de la Orden en el Mediterráneo hasta 1540, cuando regresó a Inglaterra en el preciso año en que Enrique VIII suprimía la Orden mediante una ley del Parlamento.
Sir David Gunston fue encarcelado en la Torre de Londres y, al año siguiente, el Parlamento lo condenó a muerte por negar la autoridad del rey en asuntos espirituales. Fue colgado, arrastrado y descuartizado en Santo Tomás, Southwark, el 12 de julio 1541.
Pío XI lo declaró beato el 14 de diciembre de 1929.
Oración
Oh Dios,
que hiciste del bienaventurado David un notable campeón de la fe católica
cuyo martirio trajo gloria a nuestra Orden,
te rogamos que su ejemplo nos estimule a defender la unidad de tu santa Iglesia.
Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo y el Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
Beato Carlos I de Austria
Memoria: 21 de octubre
(1887 – 1922)
Último emperador de Austria-Hungría. Fue miembro de la Orden de Malta con el rango de Bailío Gran Cruz de Honor y Devoción. Tuvo gran amor por la Eucaristía, por el Corazón de Jesús y por la Santísima Virgen. Todas sus decisiones importantes surgieron de la oración y de su profundo compromiso: “Siempre, en todas las cosas, conocer lo más claramente posible y seguir la voluntad de Dios, y esto en el modo más perfecto.”
En 1911, se casó con la princesa Zita de Borbón-Parma con quien tuvo ocho hijos. En 1916, en plena Guerra Mundial, heredó los tronos de emperador de Austria y rey de Hungría.
Considerando su dignidad imperial y real como el camino que Cristo le mostraba para hacer Su voluntad, la doctrina evangélica inspiró toda sus actividades y Carlos I puso siempre al centro de sus preocupaciones la búsqueda del bien de los pueblos que el Señor le confiaba, con especial atención en el cuidado y protección de los más débiles.
Tras el fin de la guerra en la que Austria-Hungría fue perdedora, Carlos I fue desterrado de Austria. Rechazó, porque a cambio se le exigían actos contrarios a su conciencia, la restitución del trono y de su gran fortuna personal. Exiliado en la isla portuguesa de Madeira, pobre y enfermo, entregó su alma a Dios el 1 abril de 1922, pocas semanas después de ofrecer su vida por la paz y la unidad de los pueblos. En presencia del Santísimo Sacramento, sus últimas palabras antes de morir fueron: “¡Hágase Tú voluntad!” Fue beatificado en Roma el 3 de octubre de 2004.
Oración
Dios omnipotente,
Tú que elegiste desde toda la eternidad al beato Carlos de Austria
para la alta dignidad de Emperador, rey y padre de muchos pueblos,
y lo distinguiste con el camino real de la cruz,
te pedimos humildemente que nos concedas
la pronta canonización de este soberano que, en plena guerra,
luchó por la paz, sirvió incansablemente a sus pueblos, buscando sólo Tu voluntad,
y murió en el destierro, ofreciendo su vida por ellos.
Danos el amor a la Santísima Eucaristía y fidelidad a la Santa Iglesia
que él manifestó en todo momento de su vida.
Concédenos ser, como él, esposos y padres ejemplares, instrumentos de paz,
tener un corazón abierto para los que sufren y confiar sólo en Ti
a pesar de las dificultades, persecuciones y calumnias.
Por Cristo Nuestro Señor.
Amén.
Beato Vilmos Apor, obispo, mártir
Memoria: 2 de abril
(1892 – 1945)
El obispo Vilmos Apor fue capellán conventual ad honorem de la Soberana y Militar Orden de Malta. Nació en Segesvár (Hungría), en el seno de una familia de la nobleza húngara.
Fue ordenado sacerdote el 24 de agosto de 1915, y ordenado obispo de Györ, en su país natal, el 24 de febrero de 1941.
Se distinguió por su amor a los pobres y a los perseguidos. Su lema episcopal fue Firmat mitem Crux, fortem atenuantes - La Cruz fortalece a los débiles, hace humildes a los fuertes.
El Viernes Santo de 1945, un soldado ebrio del ejército ruso lo hirió de muerte al intentar proteger a unas mujeres que se habían refugiado en el sótano del palacio episcopal. Las mujeres se salvaron, pero el obispo murió de sus heridas el lunes de Pascua 2 de abril de 1945. Sus últimas palabras fueron: “El sacrificio fue. Merecía la pena.”
Fue beatificado el 9 de noviembre de 1997 por el papa Juan Pablo II.